
Datos: Editorial:RBA Molino Traducción: Ana Herrera. Páginas:320. ISBN:9788427206755
Sinopsis: Sarah Nelson es una chica poco común. Acaba de cumplir doce años, su mejor amiga es una planta llamada Planta, a la que le cuenta su día a día; escribe dos diarios, uno para engañar a su padre y otro de verdad que tiene bien escondido. Y escribe cartas a Atticus Finch, protagonista de la novela Matar a un ruiseñor, por petición de su profesor. Hasta ahí podría ser una vida pasable y no extremadamente especial, pero si a eso le añadimos que su madre intentó matarla a los dos años y su padre es alcohólico, seguro que la ecuación sobre normalidad cambia un poco.
Alguien en quien confiar
Realmente la gran aspiración de Sarah es conquistar una vida “normal”. En su desesperación acude a Atticus porque le inspira confianza. Él -a pesar de ser un personaje de ficción- genera esa atmósfera de serenidad que establecen a su alrededor las personas que saben hacia dónde van. Desde la revuelta vida de Sarah, Atticus es una roca. Quizá sin saber ella busca entre las personas que le rodean aquellas que parece que le han encontrado algún sentido a la vida.
También por esto supongo que leer “querido Atticus” te empuja a leer (o releer) la novela de Harper Lee. Para encontrarse con el Atticus original y alcanzar la paz que dispensa.
Siempre está ahí la tentación de anestesiarlo todo de frivolidad, como hace su amiga Lisa. Pero es que al final la verdadera salida del sufrimiento es amar más…
Me parece un libro realmente bueno. Supongo que conectaran más las chicas, porque son chicas y porque -a esta edad- suelen ser más maduras.